viernes, 31 de octubre de 2008

TRUCOS PSICOLÓGICOS

El Arte de la Estrategia

 

Control Mental

Son breves técnicas que ayudan a enfocar la mente o a descansarla del ajetreo diario. Pero esto sólo es el principio...

(o pensar en un limón)

Siéntate cómodamente. Afloja la ropa que te apriete y olvida tus preocupaciones. Respira hondo y relájate. Piensa en un limón. Ahora ves su color amarillo y su textura. Notas al tacto la forma de su piel y la forma de sus extremos, así como la sensación de su peso. Con un afilado cuchillo lo cortas por la mitad.

Notas el olor fuerte y penetrante que te trae recuerdos; aprietas una mitad y ves las gotas de zumo que salen despedidas. Disfrutas del olor. Después, lo acercas a tu boca y pasas la lengua por la parte recién cortada. Te das cuenta del sabor ácido y potente de la fruta. Observa cuanta saliva has producido.

Esto es una pequeña prueba al alcance de cualquiera para observar el poder de la mente sobre el cuerpo.

T E C N I C A S

Concentración

Significa el enfocar la mente en una sola cosa (objeto, pensamiento, etc). Advierte que los pensamientos se tratan como "cosas", porque es lo que son. Ya te darás cuenta.

Elige un sitio tranquilo y silencioso, y ponte sentado cómodamente. Esto será válido para cualquier ejercicio que en adelante se describa.

Limítate a contar cada vez que inspiras al realizar una respiración. "Inspirar 1", Inspirar 2" .... etc. Será normal que otros pensamientos se presenten. No luches contra ellos, se harán mas fuertes. Deja que se agoten ellos solos.

Cada vez que pierdas la cuenta, limítate a empezar. No te juzgues, no evalúes: no compites con nadie, ni ese es el fin. Verás que no es nada fácil, pero que te sientes mejor y que tus pulsaciones han bajado y respiras mas pausado. Eso es un beneficio añadido.

Hay muchos más métodos, pero a ti te corresponde investigar.

También habrás notado que los pensamientos tienen vida propia, aparecen, molestan y generalmente, se van. Piensa que los pensamientos son tuyos, pero tu eres mas que tus pensamientos.

Respirar

Todo lo que está vivo, respira. Aprender a respirar nos da mas vida y de mejor calidad. Lo que viene a continuación es un extracto de la respiración en yoga, digamos las nociones. Hay muchas más técnicas, pero con esta ya notarás resultados espectaculares.

La técnica se denomina respiración rítmica y es la siguiente:

Inhalas profundamente por la nariz contando cuatro tiempos, retienes dentro de ti la energía y la dejas que se mueva durante cuatro tiempos; nuevamente en cuatro segundos exhalas por la boca, se retiene por cuatro tiempos y ya una vez que has vaciado los pulmones, se respira por cuatro segundos más; en resumen se hace un ciclo en cuatro tiempos: inhalar , retener, exhalar y retener.

El ejercicio debe de hacerse cuando menos durante ocho veces seguidas, con el fin de aquietar la mente, de relajarnos y de sentirnos muy bien. Como ves, requiere concentración, pero merece la pena.

En páginas sobre yoga hay mucha más información. También conviene informarse sobre respiración ABDOMINAL y CLAVICULAR.

Espero que te haya picado la curiosidad...

Relajación

Primer paso: Cierra tus ojos y empieza a respirar profundamente y lo mas lentamente que puedas, inhalando por la nariz, y exhalando por la boca.

Segundo paso: Concentra tu atención en tus pies, en tus pantorrillas y en los muslos de tus piernas y ténsalos fuertemente por unos instantes y luego suéltalos, siente la diferencia de tensión y soltura, ahora concentras tu atención en tu cadera y haces los mismo, la tensas por unos instantes y luego la aflojas y sientes la diferencia entre la relajación y la tensión, ahora te concentras en tus músculos abdominales, los tensas y sueltas, ahora tus brazos, antebrazos y manos, ténsalos fuertemente y luego suéltalos, ahora tu cuello, ténsalo y suéltalo, finalmente tensa en un solo golpe tu cuerpo y suéltalo durante todo este proceso habrás de seguir respirando profundamente, cada vez mas profundamente.

Tercer paso: En este instante tu habrás conseguido sentir la diferencia entre tensión y relajación. Ahora al seguir respirando profundamente repasa todos los músculos de tu cuerpo: nuevamente las pantorrillas, los pies, los muslos, las caderas, los músculos abdominales, el pecho, el cuello, los trapecios, los músculos de la cara; revisa si tienes algo tenso, y si lo encuentras suéltalos, relájate suavemente.

Cuarto paso: Una vez que estas seguro que no hay tensión, deberás sentir mucho más ligero lo que antes sentías de pesado, tu cuerpo se ha reducido y te sientes como si fueras de una sustancia sumamente ligera, de hecho sientes como si flotaras en el aire.

Quinto Paso: Sigue respirando profundamente inhalando y exhalando y te sigues sintiendo cada vez más ligero, en este punto habrás de permanecer algunos minutos gozando del estado de relajación.

Sexto paso: Debes mantenerte en ese estado el mayor tiempo posible y sobre todo reconocer la gran diferencia que existe de la tensión a la que estabas acostumbrado a lo que es una relajación. Empiezas a inhalar menos profundamente para ir regresando a tu estado de vigilia y al regresar a este estado no permitirás mas la tensión en tus músculos, te debes sentir relajado aun haciendo tu vida cotidiana, esta es una cuestión meramente de hábito, de costumbre y de práctica.

Desde luego, esto no quiere decir que esta pueda ser la única técnica que se utilice para relajarse, existen muchas y muy variadas, sin embargo, en la experiencia que nosotros tengo he visto que esta es la más sencilla, la más simple y en breves minutos puede llevarte a un estado de relajación total, con el gran beneficio que esto significa para tu cuerpos.

La práctica de la relación debe hacerse diariamente, ya sea en la mañana al levantarse, al mediodía o en la noche antes de dormir, es una práctica que indudablemente nos ayudará a permanecer durante todo el día con menor tensión de la normal, incluso con la práctica se puede hacer durante las horas de trabajo cuando sintamos gran tensión por los problemas cotidianos de nuestra labor; en fin, no existe ningún limite para que podamos practicar las veces que queramos en el día.

Si se hace una sola vez al día por falta de tiempo, se recomienda que sea por la noche y hay que dedicar a esta cuando menos quince o veinte minutos para que la relajación pueda realizarse profundamente y así desaparezca toda la tensión que tuvimos en forma inconsciente durante todo un día normal de trabajo.

Meditación

La meditación es la atención pura y absoluta sin asirse a nada.

Hay tres pasos en la meditación:

DESPEJAR LA MENTE,

OBSERVAR LA MENTE

DOMESTICAR LA MENTE.

Despejar la mente

Su finalidad es acallar el torrente de pensamientos que fluye en nuestra cabeza.

La primera de ellas es la que se explica en concentración sobre contar respiraciones. La frontera entre concentración y meditación es muy difusa...

Otra meditación es concentrarse de la misma manera en los latidos del corazón. Para ello, debe tomarse el pulso. Pero con el tiempo, sentirá su corazón.

La última que propongo es contemplar las nubes, una hoguera, el mar o lo que te guste. No tienes que buscar sentido a lo que ves, ni buscar pautas, ni juzgar. Sólo hay que mirar, sin más. Cuando un pensamiento aparezca en la mente, vuelve a mirar. Eso es todo. Nada menos que eso.

Observar la mente

Aquí, el objeto de la meditación son los propios pensamientos.

La primera meditación es contar pensamientos. No se debe entrar en el contenido, sino simplemente contarlos. Lleva la cuenta, nada mas. Puede ser que no aparezca ninguno, en ese caso, disfruta del momento. La finalidad del ejercicio es que te des cuenta que los pensamientos son cosas, nada mas.

Otra meditación es darse cuenta de cómo se encadenan los pensamientos. Ahora hay que entrar en el contenido del pensamiento y ver cómo un pensamiento lleva a otro y este a otro y así toda la cadena. No hay que implicarse, sólo observar como se desarrolla el proceso.

Domesticar la mente

En esta página vamos a tratar sólo de la relajación y de la visualización. Hay mas, pero son más complicados y extensos de explicar.

En la relajación, partiendo del ejercicio de relajación anterior, hay que profundizar. En cierta manera se parece a la autohipnosis.

Imagina que frente a ti hay una escalera. Tiene diez peldaños y empiezas a bajarlos. Con cada peldaño que bajas, estás más y más relajado, hasta llegar al último en el que estás totalmente relajado. Ahora ves una puerta y la abres.

Allí te encuentras en un paisaje a tu elección. Debes imaginarlo con todos los sentidos, como el truco del limón. Si imaginas una playa, tienes que verla, oír el mar y las olas, sentir el olor a algas y yodo y notar la arena y la brisa marina, así como el sol en tu piel.

Para la visualización, la técnica mas sencilla es jugar con colores.

Aprende a crear una pantalla mental. Será como una pantalla de cine en la que proyectes lo que quieras. Para empezar, vamos a calibrarla: píntala de rojo, luego de verde, luego azul claro, azul oscuro, naranja, amarillo, etc.

Haz combinaciones de dos colores. Luego haz formas simples: triángulos, cuadrados, círculos de colores, etc. También puedes atreverte con tres dimensiones... Tu imaginación pone el límite.

Consideraciones finales

Habrás notado que todo esto es fácil de entender, aunque practicarlo es otra historia. Todo esto es sólo una introducción, aunque vale para toda la vida.

Ahora te corresponde a ti investigar. Un consejo: huye de gurús y demás gente extraña, a ti te toca aprender. Piensa por ti mismo.

Investigaciones Experimentales En Telepatía Por Teléfono

 

Revista Argentina de Psicología Paranormal. , . 15, No.3-4, Julio-Octubre 2004

by Rupert Sheldrake

INTRODUCCIÓN
Aparentemente la experiencia telepática con teléfonos es común. Mucha gente no encontró razón alguna para pensar en una persona en particular, entonces el teléfono suena y la persona está en línea. O también cuando el teléfono empieza a sonar tienen un saber intuitivo acerca de quién está llamando, y resulta ser correcto.
Tales experiencias son el tipo más común de telepatía en el mundo moderno (Sheldrake, 2000, 2003, Brown & Sheldrake, 2001). Sorprendentemente, los investigadores psíquicos y parapsicólogos parecen haber ignorado este fenómeno. Estudios en Gran Bretaña, Alemania, Estados Unidos y Argentina generalmente han mostrado que la telepatía telefónica por lo general ocurre entre personas que están estrechamente emparentadas, como los miembros de una familia y los amigos más cercanos (Sheldrake, 2003).
¿Podría ser la telepatía telefónica una cuestión de mera coincidencia? Quizá las personas tienen pensamientos sobre otros sin razón alguna. Acaso estos pensamientos suelen ser seguidos por una llamada telefónica de esa persona. Si las personas sólo recuerdan las veces que aciertan y se olvidan de las veces que se equivocan, podemos considerarlo una ilusión de telepatía por una combinación de coincidencia y memoria selectiva.
Una alternativa es que la persona puede estar esperando la llamada en un momento en particular de una persona en particular, pero puede ser inconsciente de esa expectativa. Para cuando la llamada llega, no hay ninguna necesidad de pensar que se trató de una telepatía porque podría explicarse por una expectativa inconsciente. El problema es que estas expectativas inconscientes son escurridizas. De hecho, ésta puede ser una hipótesis inconcebible, porque si las expectativas de llamadas telefónicas son inconscientes, ¿cómo se puede demostrar que realmente estén allí? ¿Y si realmente están allí, podrían ser entonces el resultado de telepatía, en lugar de una alternativa a este fenómeno?
La manera mejor de responder estas preguntas es por medio de pruebas experimentales que puedan evaluarse estadísticamente. He desarrollado un procedimiento simple en el que los participantes (presuntos receptores psi) reciben una llamada de uno de cuatro diferentes sujetos “llamadores.” Saben quienes son los potenciales llamadores, pero no quien llamará en un momento dado, porque el llamador fue escogido al azar por el experimentador. Los participantes tienen que suponer quien de los llamadores es el que llama antes de que éste diga algo. La casualidad de que pudieran acertar es de una en cuatro, o sea el 25% de las veces. ¿Están los participantes significativamente en lo correcto por encima de lo que se esperaría por azar?
En este trabajo describiré los resultados de más de 800 ensayos. Los resultados fueron estadísticamente muy positivos y sumamente significativos.
MÉTODO
Participantes
En un experimento preliminar, mi ayudante en esta investigación, Pam Smart, sirvió como participante y yo como experimentador. Para los próximos experimentos, ella y yo convocamos a los participantes por medio de la sección del periódico de los anuncios de trabajo de jornada incompleta o a través de un sitio web llamado www.hotrecruit.co.uk. Intentamos deliberadamente encontrar a participantes que pensaban que tenían esta habilidad en la vida real. Nuestros anuncios decían: “¿Sabe usted quién está llamando antes de que usted descuelgue el teléfono?” Buena paga por divertirse en experimentos simples como parte de un proyecto de investigación psíquica.”
Inicialmente ofrecimos un pago de £10 por una sesión de dos ensayos, y después £10 para una sesión de un ensayo. Les enviamos detalles del procedimiento de prueba a las personas que contestaron a estos anuncios, y les pedimos que nombren a las personas a cuyos llamados pensaron que ellos podrían contestar. Les pedimos que verificaran si estas personas estaban deseosas de formar parte, y les pedimos que nos proporcionaran detalles y números de teléfono de dichos contactos. También les pedimos a los participantes que nos dijeran cuando ellos podrían tomar parte en las pruebas, y verificar así que los llamadores podrían libremente llamarlos en esos momentos. Era responsabilidad de los participantes asegurar que sus llamadores estuvieran disponibles, y que no se les pagaría por un ensayo si las llamadas no se hacían. De hecho, en la mayoría de los casos todos los llamadores estaban disponibles, y si no fuese así, el ensayo sería cancelado.
Algunos participantes eran incapaces de completar la serie de diez ensayos por una variedad de razones, cambios en su vida personal, como empezar un trabajo de jornada completa, o porque uno o más de sus llamadores era incapaces de continuar el experimento. Con suerte, todos los participantes pudieron completar la totalidad de los 10 ensayos, y evitar la posibilidad de interrumpir de parte de aquellos participantes que no estaban puntuando los niveles esperados y que pudieran rechazar hacer más pruebas. Pero si esto hubiera pasado no habría sido raro en absoluto La mayoría de los participantes que no completaron la totalidad de los 10 ensayos se los desechó porque uno o más de sus llamadores era incapaz o no tenía voluntad continuar el experimento.
Los llamadores
Para algunos de nuestros experimentos, les pedimos a los participantes que nombraran a los cuatro llamadores. Esto restringió el número de solicitantes que pudieron participar, porque la mayoría era incapaz de encontrar a cuatro personas a quienes ellos imaginaban que podrían responder telepáticamente y quienes podían y querían tomar parte. En otros experimentos les pedimos a los participantes que nombraran un mínimo de dos llamadores, y les proporcionamos los otros, que eran desconocidos para los participantes. Este procedimiento tenía la ventaja de permitirnos reclutar más participantes, y también nos permitió comparar sus respuestas a los llamadores conocidos o no conocidos La mayoría de las personas nombró sólo a dos llamadores, pero algunos nombraron tres, y el número total de ensayos con llamadores conocidos fue mayor que con llamadores desconocidos.
Procedimiento
Para cada ensayo, había cuatro llamadores potenciales. Los participantes supieron quienes eran y también supieron que uno de ellos sería seleccionado al azar arrojando un dado. Usamos dados de alta calidad comprados en Las Vegas. A cada uno de los llamadores potenciales se les asignó un número del 1 al 4, seleccionado por la tirada del dado que mostraba uno de estos números. Si el dado mostraba 5 o 6, se tiraba de nuevo hasta que diera un número entre 1 y 4.
Llevamos a cabo pruebas en las que algunos de los llamadores potenciales eran familiares o amigos, elegidos por los participantes. Otros eran personas (no familiares) cuyos nombres los participantes conocían pero con quienes ellos nunca se habían encontrado.
En todos los casos los participantes usaron teléfonos de línea sin sistema de identificación de llamada. Usamos cuatro procedimientos diferentes e involucramos simplificaciones progresivas y también un nivel de rigurosidad progresivo.
1. En el Método 1, los participantes hacian dos ensayos por sesión. Las dos llamadas se seleccionaron al azar con dos tiros de dado (ignorando los números 5 y 6). Si el dado mostraba el mismo número dos veces, entonces la misma persona era llamador en ambos ensayos. También se seleccionaron al azar los números de los ensayos. No se dijo a los participantes en qué momento se harían las llamadas, aunque por supuesto, ellos sabían que ocurrirían dentro de la sesión de prueba. Las sesiones de prueba normalmente eran de una hora de duración, comenzando y terminando en momentos acordados de antemano con participantes y llamadores. Se escogieron los momentos de las llamadas al azar, la sesión fue dividida en 6, y el inicio de uno de estos periodos se seleccionó mediante el tiro de un dado. Por ejemplo, si la sesión de prueba fuera de 10 a 11am, los seis periodos empezarían con intervalos de 10 minutos comenzando a las 10.10. Así, si el dado mostrara 4, entonces la prueba con el primer llamador seleccionado sería a las 10.40. Se tiró entonces el dado de nuevo para seleccionar el tiempo de prueba con el segundo llamador seleccionado. Si surgía 1, éste sería a las 10.10am. El experimentador (Pam Smart o yo) telefoneamos a los llamadores seleccionados al azar de antemano, normalmente una hora o dos de antemano, y les pedimos que llamaran en el momento seleccionado. Les pedimos a los llamadores que pensaran en el participante durante aproximadamente un minuto antes de llamar. También llamamos a los llamadores que no habían sido seleccionados para decirles que ellos no estaban involucrados en esta sesión de prueba. Cuando el teléfono sonó, el participante recogía el tubo y inmediatamente indicaba su suposición diciendo el nombre de la persona. El llamador revelaba entonces su identidad, para que los participantes recibieran una realimentación inmediata. Minutos después de las pruebas, los experimentadores llamaron al participante para preguntarle cuál había sido su suposición, y en algunos casos también se les preguntó a los llamadores. En ningún caso, los llamadores y los participantes discreparon. Los experimentadores grabaron los resultados y anotaron abajo la fecha y el horario de cada ensayo, los llamadores y la suposición. Este método se usó en nuestro experimento preliminar y en nuestra primera serie con 17 participantes, en un total de 198 ensayos.
2. El Método 2 fue similar al Método 1 pero involucró una simplificación del procedimiento a través del uso de horarios fijos para los dos ensayos en la sesión, por ejemplo a las 10.15 y 10.30 AM. Al primer llamador en ser seleccionado se le pidió llamar a las 10.15, y al segundo (con una posibilidad de 1 en 4 que fuera de nuevo la misma persona) que llamara a las 10.30. Se llamó a estas personas de antemano a la sesión de prueba y se les dijo que habían sido seleccionados y cuándo debían llamar. Se llamó a aquellos que no habían sido seleccionados y se les dijo que no habían sido seleccionados. Los experimentadores grabaron las suposiciones como en el método 1. Usamos este método en 87 ensayos.
3. En el Método 3, había sólo un ensayo por sesión. Los experimentadores seleccionaron al azar al llamador 15 minutos antes del momento de la prueba arreglada de antemano. Por ejemplo, se le dijo al llamador que la hora de la prueba era 2.30pm, entonces se seleccionó al azar a las 2.15pm, y se lo notificó antes de las 2.20pm. Usamos este método con 37 participantes. Les dijimos a los llamadores que si no eran notificados 5 minutos antes del momento de la prueba, significaba entonces que no habían sido seleccionados. Esta simplificación hizo posible conducir una serie separada de ensayos en una única sesión rápidamente, normalmente 5 ensayos por sesión a intervalos de 15 minutos. Los experimentadores grabaron los resultados de las pruebas igual que en el método 1.
4. En el Método 4, los cuatro llamadores estaban en la misma situación, junto con el experimentador, operadores de video independientes filmados continuamente al participante y a los cuatro llamadores. Las películas se editaron luego en un formato de pantalla dividida sincronizada en el que el participante puede verse a un lado de la pantalla y los llamadores al otro.
Ensayos videograbados
En los ensayos, se videograbó continuamente a los participantes durante la sesión experimental. La cámara de video estaba fija en posición como para que el teléfono sea claramente visto. Para los Métodos 1 a 3, los mismos participantes encendieron la videocámara al inicio de la sesión y lo apagaron después de terminar el ensayo. Cuando un tape terminaba, se enviaba por correo a Pam Smart. En todos los casos, los ensayos se filmaron en el video con la fecha y la hora codificada en la película.
Cuando el teléfono empezaba a sonar, el participante decía su afirmación (p.ej. “llama X”) a la cámara antes de atender el teléfono. Además, en algunos ensayos, a los participantes se les pidió también valorar el nivel de confianza de su afirmación, siendo “seguro”, “no muy seguro” o “adivinando.” Inmediatamente al atender el teléfono de nuevo los participantes decían su afirmación en voz alta diciendo el nombre de la persona antes de atender. Los llamadores revelaban luego su identidad para que los participantes recibieran realimentación inmediata. En la mayoría de los casos, los participantes estaban solos en su casa o departamento durante los ensayos. Sin embargo, durante algunos ensayos con Sue Hawksley, su hija (de 8 años de edad), estaba presente en la casa, y en uno de los ensayos con Thomas Marcovici, su padre estaba en casa pero en un cuarto diferente. En el resto de los ensayos, Scott Reeves y Claire Morsman estaban solos.
Una persona independiente del experimento, que no sabia detalles de las pruebas ni tampoco sabía quién estaba llamando o cuando llamarían, evaluó los vídeos “a ciegas” con la hora codificada. Esta persona grabó las afirmaciones de los participantes y sus comentarios, y los horarios en que lo hicieron. También se ocupó de controlar si había alguna otra llamada telefónica, o si el participante salía de cámara, en cualquier etapa del experimento. Se inhabilitó cualquier ensayo en el que los participantes recibían otras llamadas o salían del rango de la cámara.
Estadísticas
Para la comprobar la hipótesis de que el porcentaje de afirmaciones correctas estaría por encima del nivel de probabilidad de .25, o sea el 25%, usamos el test del binomio exacto (Siegel & Castellan, 1988). La hipótesis nula era que la probabilidad de que una afirmación debía ser de .25 o 25%.
En la comparación de los resultados de diferentes experimentos usamos el método de Stouffer (Rosenthal, 1991).
En la comparación de resultados con llamadores conocidos o no conocidos, o los resultados en los ensayos primero y segundo, usamos el test de exactitud de Fisher (Siegel & Castellan, 1988). Para comparar los rangos de éxito en los ensayos con la autoevaluación de la confianza del participante usamos el test de tendencia de Cochran & Armitage (Agresti, 2002).
Calculamos exactamente en 95% los límites de la verdadera probabilidad de una respuesta correcta, así descrito por Hahn & Meeker (1991).
RESULTADOS
Experimentos que no fueron videograbados
En un total de 571 ensayos no videograbados, con 63 participantes, el porcentaje de éxito global fue de 40%, con 95% de confiabilidad en el rango límite entre el 36 al 45%. Este efecto era estadísticamente muy significativo (p= 4x10 -16 ) y se pueden encontrar mayores detalles en otro artículo publicado en inglés (Sheldrake & Smart, 2003a).
En los ensayos del Método 1, se seleccionaron los horarios en que las llamadas fueron realizadas al azar, y los participantes no sabían cuando ocurrirían las llamadas. Diseñamos este procedimiento para simular una situación de la vida real en la que las personas normalmente no reciben llamadas en momentos arreglados de antemano. En los otros ensayos, los siguientes Métodos 2 y 3, las llamadas se hicieron en momentos prestablecidos, sabiendo de antemano quienes eran los participantes. El uso de tiempos preestablecidos simplificó el procedimiento experimental, aunque era más artificial. Para averiguar qué efecto provocó esta diferencia del procedimiento en los resultados, comparamos los resultados globales del Método 1 con aquellos de los Métodos 2 y 3 (Tabla 1). y no hubo ninguna diferencia significativa. El porcentaje de éxito era casi idéntica con ambos métodos: 39.9% correcto con horarios al azar, y 40.3% correcto con horarios fijos conocidos de antemano por los participantes.
TABLA 1
COMPARACIÓN DEL ÉXITO DE LOS PARTICIPANTES EN LOS ENSAYOS CON LLAMADAS EN HORARIOS SELECCIONADOS AL AZAR (MÉTODO 1)
CON LLAMADAS EN HORARIOS FIJOS CONOCIDOS DE ANTEMANO POR LOS PARTICIPANTES
(MÉTODOS 2 Y 3).

Método
Ensayos
Aciertos
% de Aciertos
p

Horarios al azar
198
79
39.9
3x10-6

Horarios fijos
355
143
40.3
4x10-15

Total
553
222
40.1
4x10-15

En los métodos 1 y 2, los participantes recibieron dos llamadas durante cada sesión experimental, y los se notificó a los llamadores antes que comenzara la sesión. Ahora bien, el primer llamador podría darle alguna pista plausible al participante acerca de la identidad del próximo llamador, aunque les habíamos pedido específicamente a los llamadores que no lo hicieran. Por ejemplo, cuando el mismo llamador había sido escogido para ambas llamadas, podría haber indicado que estaría llamando de nuevo pronto. O quizás el primer llamador podría haber indicado consciente o inconscientemente que alguien más estaría haciendo la próxima llamada. En este caso, los participantes habrían estado escogiendo de entre 3 potenciales llamadores, en lugar de 4, y así las probabilidades de éxito de las afirmaciones serían más altas.
Comparamos los resultados con el primer y el segundo llamador en aquellos experimentos en los que se llevaron a cabo los Métodos 1 y 2. Los datos se presentan en la Tabla 2. Si por alguna razón hubiera habido una fuga de información de parte de los primeros llamadores, el porcentaje de éxito en las segundas llamadas debió haber sido más alto que las primeras. De hecho, fue ligeramente más alta, 43% contra 35%. Sin embargo esta diferencia no fue estadísticamente significativa (por el test de exactitud de Fisher, p= .10). También, cualquier fuga de información entre el primer y el segundo ensayo no debería considerarse por los éxitos en los primeros ensayos que estuvieron significativamente por encima de lo esperable.
TABLA 2
COMPARACIÓN DE LOS PUNTAJES DE LOS PARTICIPANTES EN EL PRIMER Y SEGUNDOS ENSAYO, SIGUIENDO LOS MÉTODOS 1 Y 2.

Ensayos
Ensayos
Aciertos
% de Aciertos
p

Primero
145
51
35
0.004

Segundo
138
60
43
2x10-6

Total
283
111
39
1x10-7

Los datos representan el total de los 24 participantes (incluyendo el experimento preliminar con P.S.). En unos pocos casos el segundo ensayo no tuvo resultados, en cambio hubo más resultados en el primero que en el segundo ensayo. El posible problema de fuga de información no se descubrió con el Método 3, cuando hubo sólo una llamada por sesión. Llevamos a cabo 186 ensayos por este método en el cual 79 (42%) fueron aciertos (Sheldrake y Smart, 2003b). Este resultado fue estadísticamente muy significativo (p= 1x10-7).
Los efectos de la distancia
Para averiguar si la distancia puede tener algún efecto en la habilidad de los participantes de identificar a los llamadores, seleccionamos a los participantes en el extranjero, como amigos o miembros de la familia. Los llamadores extranjeros estaban a 1.500 km. (en Grecia) y a 18.000 km. (en Australia).
Estos participantes tuvieron éxito con llamadores en el extranjero, con 28 afirmaciones correctas de 43 (65%), un resultado sumamente significativo (p= 3x10-8). Con llamadores en Gran Bretaña, el porcentaje de éxito fue más baja (35%). En la mayoría de los casos, los llamadores en el extranjero eran las personas con quienes los participantes estaban más estrechamente relacionados, como madres y novios, considerando que éste no fue el caso con la mayoría de los llamadores en Gran Bretaña. Este resultado implica que para la identificación exitosa de los llamadores, la cercanía emocional era más importante que la proximidad física (Sheldrake y Smart, 2003a).
Comparación de llamadores familiares y no familiares
Con 37 participantes, comparamos los resultados con llamadores familiares y no familiares. En conjunto 101 de un total de 190 (53%) de las afirmaciones con llamadores familiares fueron correctas (p= 1x10-16), mientras que con los llamadores no familiares, sólo 33 de 132 (25%) afirmaciones resultaron correctas (Sheldrake y Smart, 2003a). Esta diferencia entre las respuestas con llamadores familiares y no familiares fue muy significativo (p= 3x10-7)
Experimentos Videograbados
En total, administramos 294 ensayos de telepatía telefónica videograbados, de los que se eliminaron 23 porque los participantes salieron de la cámara en algun momento o recibieron llamadas no esperadas durante el periodo experimental. De los 271 participantes de los ensayos restantes, 122 (45%) tuvieron éxito por encima del nivel de probabilidad del 25%. La importancia estadística de este resultado es enorme (p= 1x10-12). El 95% de confiabilidad fue el resultado de este porcentaje de éxito entre los rangos límite de 39% a 51%. Estos ensayos se describen en detalle en Sheldrake y Smart (2003b).
La participante con quien más experimentamos fue Sue Hawksley (SH), quien participó en varios métodos diferentes de ensayos videograbados controlados. Con llamadas en horarios elegidos al azar (Método 1) Sue obtuvo éxito en 18 de 32 ensayos (56%; p= .0002). Con dos llamadas por sesión en horarios fijos (Método 2), obtuvo 28 respuestas correctas de 64 (44%; p= .0005). Con una llamada por sesión (Método 3), obtuvo 30 respuestas correctas en 70 ensayos (43%; p= 0.0008). Y con el Método 4, con cuatro llamadores en el mismo lugar, siendo los llamadores filmados continuamente, obtuvo 8 respuestas correctas de 17 (47%; p= .04).
Además experimentamos con otros tres participantes usando el Método 3, y dos de ellos tuvieron un puntaje significativo por encima de lo esperado por azar (Tabla 3).
TABLA 3
SUMARIO DE LOS RESULTADOS DE LOS ENSAYOS VIDEOGRABADOS

Participantes
Ensayos
Aciertos
% de Aciertos
p

SH Método 1
32
18
56
0.0002

SH Método 2
64
28
44
0.0005

SH Método 3
70
30
43
0.0008

SH Método 4
17
8
47
0.04

S. Reeves
30
12
40
0.05

C. Morsman
30
10
33
0.20

T. Marcovici
28
16
57
0.0003

Total
271
122
45
1x10-12

Confianza y éxito
Después de que Sue Hawksley había iniciado la primera serie de ensayos videograbados, nos dijo que a veces se sentía más segura sobre sus afirmaciones que en otros momentos. Para explorar si estos sentimientos se relacionaban con la exactitud de sus afirmaciones, le pedimos que diga a la cámara cuanta confianza sintió cuando hacía sus afirmaciones. Había tres calidades de confianza, “muy segura,” “no muy segura,” y “simplemente adivinando.” En total, Sue dijo la confianza que sintió en los 144 ensayos. Sus evaluaciones de confianza se transcribieron del vídeo.
Los resultados mostraron que cuando Sue pensaba que simplemente estaba afirmando, de hecho alcanzaba sólo el 29% de éxito, no significativamente más alto que el nivel de probabilidad del 25%. Cuando decia que no estaba segura, tuvo la razón en 35% de las veces, significativamente más alta que la probabilidad, pero no mucho más. Cuando ella se sentía segura del éxito espectacular que tenía, acertaba el 82% de las veces, con una probabilidad de billones contra uno (Tabla 4) de que estos resultados se deban solamente al azar.
La diferencia entre su tasa de éxito, cuando estaba “muy segura,” “no muy segura” y “simplemente adivinando”, era muy significativa (usando el test de Cochran y Armitage, p= .00003).
TABLA 4
RELACIÓN ENTRE LA CONFIANZA DE SUE HAWKSLEY Y SU ÉXITO*

Confianza
Ensayos
Aciertos
% de Aciertos
p

Muy Segura
28
23
32
3.6x10-10

No Muy Segura
95
33
35
0.02

Simplemente adivinsndo
21
5
29
n.s.

* Entre su confianza y su éxito en aquellas afirmaciones acerca de quién estaba llamando en los 144 ensayos videograbados.
Llamadores familiares y no familiares
De acuerdo a los resultados de los ensayos no videograbados, los participantes tuvieron más éxito con los familiares como llamadores que con los no familiares. En las pruebas con Sue Hawksley se usó el Método 3. Hubo dos llamadores familiares y dos no familiares. Con los llamadores familiares, Sue acertó 25 de 35 veces (71%; p=1x10-8). Con los llamadores no familiares acertó sólo 5 de 35 veces (14%), lo cual no fue un resultado significativo. Cuando se probó con el Método 4, Sue tuvo nuevamente mayor éxito con llamadores familiares, acertó 7 contra 13 veces (54%; p= .02); con su llamador no familiar acertó solo 1 de 4 ensayos, siendo el nivel de probabilidad de 25%.
-7).
TABLA 5
COMPARACIÓN DE PROPORCIONES DE ÉXITO CON LLAMADORES FAMILIARES Y NO FAMILIARES

Participantes
Familiar % de Aciertos
No Familiar % de Aciertos
p de la diferencia

SH Método 3
71
14
0.000001

SH Método 4
54
25
n.s.

S. Reeves
47
31
n.s.

C. Morsman
41
23
n.s.

T. Marcovici
78
20
0.005

TOTAL
61
20
0.0000001

Una Repetición Televisada
En el 2003, el Canal 5 de la TV británica, me pidió una repetición filmada de mis pruebas de telepatía telefónica. Los productores de TV querian dirigir el ensayo con celebridades de la TV. Yo señalé que las celebridades debían conocerse muy bien entre si; la telepatía no funciona bien con extraños. Convocaron a cinco miembros de un conjunto de musica, las hermanas Nolan, que fueron bien conocidas en Gran Bretaña en los años ochenta. Estas hermanas están estrechamente relacioandas a nivel emocional y estuvieron durante meses trabajando juntas en la plenitud de su fama. Aun viven cerca nuestro, a unos pocos kilómetros.
Para este experimento, las hermanas Nolan, Ana, Maureen, Linda, Denise y Colleen, y yo nos encontramos en un pub en Poland Street, en el Soho de Londres, la mañana del Domingo 27 de Abril del 2003. El pub se alquiló especialmente para este propósito, y no estaba abierto al público en ese momento. Los ensayos se llevaron a cabo según el Método 4, antes desrito (ver detalles completos en Sheldrake, Godwin y Rockell, 2004).
En cámara, les expliqué a las hermanas Nolan cómo iba a realizarse el experimento. Todos estaban familiarizados con casos de telepatía telefónica y la mayoría aparentemente había tenido experiencias telepáticas. Sólo Ana era escéptica de su realidad. Les pedí que escogieran cuál de ellas serviría como participante y escogieron a Colleen, la más joven, que fue llevada en automóvil a un cuarto privado, alquilado para este propósito, en el Strand Palace Hotel, aproximadamente a 1 km. de distancia. Para este experiment, usamos líneas directas sin identificadores de llamadas. El teléfono en el cuarto del hotel era una línea directa que no pasaba por el panel de distribución en la conserjería del hotel.
Durante los ensayos, algunos miembros del equipo de producción estaban en el pub con las cuatro llamadoras y yo. Otros estaban en el cuarto con Colleen en el Strand Palace Hotel. En ambas locaciones, los cameraman, sonidistas y el resto del personal de televisión dieron testimonio de lo que pasó. A nadie se le permitió usar teléfonos móviles durante los ensayos experimentales.
Ante cada ensayo, las cuatro llamadoras potenciales y yo nos sentamos alrededor de una mesa en la que había un teléfono. A cada una de las cuatro llamadoras se les asignó un número del 1 a 4. Yo escogí a la llamadora al azar, tirando un dado.
Cuando seleccionamos a la llamadora, las otras tres hermanas y yo salimos y fuimos a un cuarto arriba, donde charlamos sobre otros asuntos e intentamos evitar pensar en Colleen. Las tres hermanas estuvieron continuamente conmigo, y no hicieron ninguna llamada telefónica. La llamadora seleccionada pensó en Colleen, y se le pidió llamarla en un momento determinado. En el momento especificado, la llamadora marcó el número del cuarto de Colleen en el Strand Palace Hotel. A Colleen no se le dijo a que hora exacta se haría la llamada. Cuando su teléfono sonó, ella dijo quién pensó que estaba llamando, y se le pidió hacer esto antes de atender el teléfono. Se filmaron a la llamadora y a Colleen continuamente en un videotape con el horario codificado.
Se realizaron ensayos con aproximadamente 5 minutos de intervalos entre las 2.30pm y las 3.40pm. Como se había acordado de antemano, llevamos a cabo doce ensayos en total. De los 12 ensayos realizados, Colleen identificó correctamente quién estaba llamando en 6 (50%; p= .05).
DISCUSIÓN
Los resultados de estas pruebas de telepatía telefónica parecen ofrecer fuerte evidencia experimental en favor de la telepatía. Sin duda, los escépticos considerarán los datos como demasiado buenos para ser verdad. Así que habrá muchos parapsicólogos que están acostumbrados a efectos mucho más pequeños y a resultados menos significativos. Esto inevitablemente levantará sospechas de que mis resultados podrían haberse debido a posibles dispositivos ocultos, o incluso al fraude deliberado.
En todos estos ensayos, los llamadores y los participantes estaban en edificios separados, y a menudo a cientos o incluso miles de kilómetros de distancia. No había ninguna posibilidad de fuga de información por vista u oido, o a través de otros medios sensoriales normales.
La posibilidad que algunos de los resultados podrían explicarse por deficiencias en el proceso de aleatorización se han controlado chequeando las aleatorizaciones pre-pruebas con el dado. No encontré ninguna desviación estadística significativa (Sheldrake y Smart, 2003a, 2003ab).
Posible Fuga de Información o Fraude
La objeción más seria a los resultados positivos que obtuvimos es que podría haber habido una fuga de información de los llamadores a los participantes a través de las llamadas telefónicas hechas, o incluso por fraude deliberado.
Una posibilidad de fuga de información estuvo presente en los ensayos llevados a cabo en los Métodos 1 y 2. Las sesiones experimentales se practicaron con dos ensayos, y los llamadores supieron de antemano si estarían involucrados en ambos o en sólo uno de estos ensayos. De ahí que los llamadores, en los primeros ensayos, podrían consciente o inconscientemente haber transmitido insinuaciones acerca de si ellos habrían o no llamado en el segundo ensayo. En este caso, el porcentaje de éxito en los segundos ensayos debía haber sido significativamente más alta que en los primeros. Éste no era el caso, como se discutió anteriormente. En los primeros ensayos, no hubo ninguna fuga de información que pudo haber ocurrido, no obstante las proporciones de éxito de los participantes estuvieron más allá de las probabilidades.Y ninguna fuga de este tipo podría ocurrir en los ensayos de los Métodos 3 y 4, qué incluso dieron resultados muy positivos y significativos.
¿Qué hay acerca del fraude deliberado? En los ensayos no videograbados, quizá los participantes y sus llamadores mintieron sobre las afirmaciones y dieron falsamente las incorrectas como correctas. O quizá después que los llamadores potenciales habían sido informados que fueron escogidos, ellos llamaron o mandaron emails al participante para pasar esa información. Pero aun cuando los llamadores que no habían sido seleccionados le hubieran dicho esto al participante, las opciones se hubieran reducido, y de hecho, la probabilidad de afirmaciones exitosas aumentó.
La hipótesis del fraude es implausible por tres razones principales.
Primero, es muy improbable que la gran mayoría de los participantes hubiera cometido fraude. Es quizás concebible que algunos casos pudieran haberlo hecho, pero unos pocos fraudes no podrían producir el resultado que observamos en los que la mayoría de los participantes puntuaron por encima de la probabilidad.
Segundo, sabemos que nosotros mismos no cometimos fraude, y que los llamadores no familiares no hicieron trampa. Si algunos de los llamadores familiares hubiera cometido fraude informando a los participantes que no habían sido seleccionados, la probabilidad de adivinación de un llamador no familiar habría aumentado. Aún así los puntajes de los llamadores no familiares no fueron más allá del nivel de probabilidad anteriores.
Tercero, en los ensayos videograbados, los participantes dijeron su afirmación a cámara antes de atender el teléfono, y de hecho no pudieron haber mentido sobre los resultados. También seleccionamos al azar sólo al llamador después que la filmación había empezado. En lo referente a si el participante hubiera recibido cualquier otra llamada telefónica o emails antes de la llamada del ensayo, nos habriamos dado cuenta de ello. Un observador independiente evaluó los videos a ciegas, y en algunos ensayos en los que el participante recibió una llamada extra-experimental o estaba fuera de cámara, aunque fuera brevemente, ese ensayo hubiera sido inhabilitado. A pesar de todas estas formas en los que los posibles fraudes quedaron descartados, los datos de estos ensayos videograbados dieron resultados positivos altamente significativos.
Además, en los datos de la serie sucesiva de ensayos con los participantes que estudiamos con principal interés, Sue Hawksley, también está contra la hipótesis de fraude. Sus primeros 30 ensayos estuvieron sin filmar, y confió en sus propios informes de lo que pasó y los de sus llamadores. Obtuvo un 47% de aciertos. En sus ensayos videograbados en los Métodos 1, 2 y 3 (que eran progresivamente más rigurosos) sus porcentajes de éxito fueron de 56%, 44% y 43% respectivamente (Tabla 3). En el Método 4, el más riguroso de todos, también se filmó continuamente a los llamadores y se observó que el porcentaje de éxito fue del 47%.
Hay sin embargo, una probabilidad importante de fraude que necesitamos tener presente. El participante podría tener un cómplice, no visible en la cámara que hizo señas visuales. Este cómplice podría recibir mensajes confidenciales de los llamadores, por ejemplo, mensajes de texto a un teléfono móvil para comunicar si habrían sido o no escogidos. De hecho, un examen de los videos no muestra ninguna señal de que los participantes hayan tenido un posible cómplice que reciba señales. Pero un crítico tenaz podría decir que el participante, el llamador y el cómplice ocultaron con gran habilidad. Pero trabajamos con 5 participantes diferentes en ensayos videograbados y parecería bastante improbable que todos hubieran inventado algo independientemente en forma tan detallada y lo hubieran puesto en práctica. Ninguno de los participantes nos conocía, y todos vivían en diferentes partes de Inglaterra. Pero, con todo, no es imposible.
La única manera de estar seguro era tener un testigo que observara al participante, aparte de la cámara de video. Nosotros lo hicimos. Cuando empleamos el Método 4 con Sue Hawksley un operador de video independiente estuvo continuamente presente en su casa, pero no vio a ningún cómplice, y no había nadie presente, excepto Sue y el operador. El porcentaje de éxito de Sue fue de 47% similar a sus otras pruebas. lo mismo era verdad acerca del experimento con las hermanas Nolan, donde los llamadores y el receptor estaban bajo observación continua. El porcentaje de éxito fué del 50%. Esta evidencia refuta la hipótesis del cómplice.
Posibles Aparatos Cronometrando
Una posible fuente de información que podría dar lugar a resultados positivos en algunas de las pruebas es el cronómetro de llamadas. En experimentos usando los Métodos 2 y 3, los participantes sabían cuando se programaban las llamadas. Por ejemplo, si uno de los llamadores fuera una persona que llegaba habitualmente tarde, entonces, si las llamadas llegaban tarde, el participante podría haber inferido que este llamador estaba en línea.
En los ensayos videograbados, he explorado esta posibilidad examinando los tiempos exactos en los que las llamadas se recibían, así como las grabadas en videotapes. En tres de los cuatro participantes no había ningún modelo sistemático de desvios del tiempo fijado con llamadores diferentes. Además, el modelo de errores no mostró ninguna relación con el cronometrado exacto de las llamadas lo cual indicó que los participantes no estaban infiriendo los nombres de algunos llamadores cuando se recibían las llamadas más temprano, y con otros llamadores cuando éstas llegaban un poco más tarde. Había sólo una excepción: en el caso de Thomas Marcovici (ver Tabla 3) los llamadores normalmente estaban 2 o más minutos demorados, y esto indicaría plausiblemente indicios de este llamador en particular con éste participante.
En todos los otros casos, los llamadores hacían las llamadas puntualmente, y unas pocas llegaban más de dos minutos temprano o tarde. Por ejemplo, en los experimentos con Sue Hawksley con el Método 3 (Tabla 3), el 91% de las llamadas ocurrieron dentro de los dos minutos del tiempo fijado, y el 78% dentro del minuto. Si Sue hubiera estado detectando indicios de llamadas inusualmente tardes o tempranas, su porcentaje de éxito con estas llamadas impuntuales debería haber sido más alto que con las llamadas puntuales. Pero de hecho, su el porcentaje de éxito con las llamadas que ocurrieron dentro del minuto de tiempo fijado fue del 50% y con las llamadas que llegaban más de un minuto temprano o tarde, el porcentaje de éxito era sólo del 26%, cercano al nivel de probabilidad. De modo que los datos no apoyan la idea de que los resultados se pueden explicar en términos de aparatos cronometrados.
En todo caso, la hipótesis del aparato cronometrado no puede explicar los resultados altamente significativos que se dieron al usar el Método 1. Las llamadas se hicieron en horarios al azar y los participantes no supieron cuándo había que esperarlas. En los experimentos no filmados, el porcentaje de éxito con cronómetros al azar fue del 40%, igual que con cronómetro fijo (Tabla 1). En los ensayos videograbados, el porcentaje de éxito con cronómetros al azar fue del 56% (Tabla 3). Por otra parte, en experimentos que empleaban el Método 4, las llamadas no se hicieron en momentos fijos conocidos por los participantes, y aquí también los resultados fueron positivos y estadísticamente significativos: 47% con Sue Hawksley (Tabla 3) y 50% con las hermanas Nolan.
Así que con la posible excepción de uno de los llamadores para uno de los participantes, el éxito de estas “telepatías telefónicas” no se puede explicar en términos de artefactos cronometrados.
Comparación de llamadores familiares y no familiares
En ambos tipos de ensayos, los videograbados y los no videograbados, había una diferencia muy notable entre el éxito de los participantes con llamadores familiares y no familiares. Sin embargo, en la mayoría de los participantes había también cierta tendencia a contestación en favor de los llamadores familiares, en los que dijeron los nombres de los llamadores familiares más a menudo que cuando recibían llamadas de estas personas.
La razón por la cual ésto puede afectar la comparación de los rangos de éxito entre llamadores familiares y no familiares puede ser considerado si imaginamos un caso extremo donde un participante siempre ha adivinado los nombres de llamadores familiares, y nunca los nombres de llamadores no familiares. En un caso en donde había dos llamadores, uno familiar y otro no, si no hubiera ocurrido ninguna telepatía, habría un porcentaje promedio de éxitos del 50% con llamadores familiares y 0% con llamadores no familiares. Por supuesto, el porcentaje de éxito global estaría en el nivel del azar, o sea el 25%, pero la mayor diferencia entre el éxito con llamadores familiares y no familiares sería completamente explicado por la tendencia de la respuesta en cada caso.
Una manera simple de corregir esta tendencia es expresar el rango de éxito en base al número de afirmaciones en relación a personas familiares y no familiares, en lugar de hacerlo en base al número de llamadas de estas personas (Sheldrake y Smart, 2003c). Aplicando este método a los ensayos videograbados y no videograbados, la diferencia entre los llamadores familiares y no familiares disminuyó, pero todavía es muy significativo (p = .006).
En los ensayos videograbados corregimos la tendencia a responder de manera más sofisticada y usamos un análisis de permutación aleatorizado para los datos de cada participante (Sheldrake y Smart, 2003c). Estas permutaciones se llevaron a cabo de manera tal que el número de llamadas de los diferentes llamadores seguía siendo el mismo, y de igual manera el número de afirmaciones del nombre de cada llamador, pero las afirmaciones se asignaron al azar a las llamadas en 30.000 combinaciones diferentes. Este análisis mostró que cuando la tendencia de la contestación se tuvo en cuenta, el éxito con llamadores familiares todavía era significativamente mayor que con los llamadores no familiares (p= .0003). De modo que cuando se tuvo en cuenta la tendencia de la contestación, los participantes eran mucho más exitosos con los llamadores familiares que con los no familiares. Esta diferencia apoya una interpretación en términos de telepatía que típicamente tiene lugar entre las personas que comparten lazos sociales y emocionales (Gurney, Myers & Podmore, 1886; Stevenson, 1970; Schouten, 1982; Sheldrake, 1999, 2003). También está en conformidad con el hecho de que la telepatía telefónica en el mundo real ocurre principalmente con familiares (esposos, compañeros de trabajo, familiares y amigos) (Sheldrake, 2003).
El Efecto de la Distancia
Los casos espontáneos de telepatía parecen ocurrir más allá de las distancias, centenares e incluso miles de kilómetros (p. ej. Gurney, Myers & Podmore, 1886; Stevenson, 1970; Sheldrake, 1999, 2003), lo cual sugiere que la influencia telepática no disminuye con la distancia. Sin embargo, la investigación experimental en telepatía se ha dirigido principalmente sobre distancias relativamente cortas, a veces dentro del mismo edificio o en edificios adyacentes, como los estudios de adivinación de cartas en la Universidad de Duke, y también en la mayoría de los experimentos de telepatía en sueños y en los experimentos ganzfeld (una excelente revisión se puede leer en Radin, 1997). Una excepción fue el experimento de telepatía con ensayos a 1,700 km de distancia dirigido por L.L. Vasiliev en Rusia (Braude, 1979).
En la investigación experimental con perros que saben cuando sus dueños están regresando a su casa, donde se estudia la influencia telepática de las intenciones de los dueños en los perros (Sheldrake y Smart, 1998, 2000a, 2000b), pruebas efectuadas a 8 a 70 kms. de distancia no muestran ninguna indicación de declinar con la distancia.
Usando teléfonos es relativamente fácil de conducir experimentos de telepatía a cualquier distancia hasta un máximo de 20.000 km. En nuestros ensayos con llamadores en el extranjero no encontramos ninguna sugerencia contraria de que el efecto telepático decayera con la distancia hasta 18,000 km de distancia, de acuerdo con observaciones e investigaciones anteriores.
Telepatía y Otras Formas de Psi
Los resultados de los experimentos mencionados en este informe no parecen ser explicables en términos de aparatos, fuga de información o indicios sensoriales. ¿Pero la telepatía es la única explicación posible? Hay personas que podrían querer defender que estos resultados se apoyan en psi, pero no en la telepatía en particular. Quizá anticiparse llamadas telefónicas podría ser más una cuestión de precognición o clarividencia que de telepatía. Pero en este caso, sería dificil explicar por qué la precognición o la clarividencia no funcionaron con llamadores no familiares, sino sólo con familiares. La precognición y la clarividencia no parecen depender de lazos sociales, considerando que la telepatía sí puede. La diferencia es muy significativa en los resultados con llamadores familiares y no familiares de acuerdo a la hipótesis de la telepatía.
En términos de telepatía una posible explicación sería que los llamadores casi inevitablemente enfocan su intención en la persona que están llamando. Antes de hacer la llamada, tienen que pensar en la persona que a quien llaman. Mientras se preparan para hacer la llamada, su intención se dirige hacia la persona a la que llaman. En ese momento, esta persona puede empezar a pensar en el llamador, o tener una intuición de que esa persona está llamando cuando suena el teléfono.
En pruebas más amplias deberíamos poder distinguir experimentalmente entre telepatía telefónica y precognición. Se les preguntó a los participantes si podrían suponer quien estaba a punto de llamar antes que los llamadores fueran seleccionados al azar. El éxito en ensayos como éste hablaría a favor de una explicación en términos de precognición.
La Investigación de la Telepatía Telefónica y su Potencial
Si la telepatía telefónica existe, ¿porqué entonces las personas no aciertan siempre? En los experimentos antes descritos, el promedio de éxito estaba por debajo del 50%, en otras palabras, el promedio de fracaso estaba por encima del 50%. Los participantes respondieron a algunos llamadores familiares más que a otros (Sheldrake y Smart, 2003a,b). Algunos participantes eran más sensibles, otros menos (Tabla 3). Pero incluso los participantes más sensibles no siempre tenían razón.
La naturaleza artificial de estas pruebas puede haber debilitado la influencia de la telepatía. En la vida real, la telepatía no involucra una elección consciente entre cuatro llamadores igualmente probables que no tienen ninguna necesidad emocional para llamar. Ni ocurre cuando realmente se necesita. No obstante, a pesar de las condiciones antinaturales impuestas por este protocolo experimental, la comunicación telepática ocurre todavía a una magnitud muy significativa.
Hay varias posibles razones para que estas pruebas tuvieran más éxito que la mayoría de los otros experimentos parapsicológicos. Primero, las duplas estaban estrechamente relacionadas en los momentos de aparente telepatía en el mundo real. Éste no es el caso con los procedimientos experimentales como el ganzfeld (p. ej. Radin, 1997), qué es muy artificial, y no corresponde a ninguna situación familiar en la que la telepatía ocurre espontáneamente.
Segundo, nosotros convocamos a participantes que pensaban que habían experimentado telepatía telefónica en la vida real y se consideraban psíquicos. Nosotros estábamos trabajando con una muestra seleccionada por nosotros mismos de la población que probablemente tengan la habilidad por encima del promedio. Para la mayoría de nuestros experimentos filmados también seleccionamos participantes que funcionaran bien en las pruebas iniciales no videograbadas, y quiénes, por consiguiente tenían una buena oportunidad de hacerlo bien.
Tercero, les pedimos a los participantes que escogieran a amigos íntimos o miembros de la familia como llamadores. En la vida real, la telepatía telefónica, como otros tipos de telepatía, tiene lugar normalmente con personas conocidas, no con desconocidos o extraños (Sheldrake, 2003). Las pruebas descritas en este informe confirman que los puntajes son mejores con familiares que con extraños.
Cuarto, llevamos a cabo nuestros ensayos bajo las condiciones más naturales y relajadas posibles, en la mayoría de los casos con participantes que lo hacian en sus propias casas.
Muchos experimentos parapsicológicos en telepatía, por el contrario, usaron participantes no seleccionados que pueden tener pobre habilidad telepática. Normalmente usaron emisores y receptores extraños. Y esto generalmente ocurre en situaciones de laboratorio artificiales, que algunos participantes encuentran intimidante.
Nuestros experimentos de telepatía telefónica han dado resultados significativos, repetibles, y con resultados positivos. Si otros investigadores pueden reproducir estos hallazgos, las pruebas de este tipo podrían sostener una fuerte evidencia sobre la existencia de psi, y también abrir nuevas posibilidades para la investigación de los procesos a través de los que opera.
AGRADECIMIENTOS
Agradezco a Pam Smart su asistencia en esta investigación, y al Dr. Jan van Bolhuis de la Universidad Libre de Amsterdam por su ayuda con el análisis estadístico. Este trabajo fue posible gracias al apoyo financiero de la Fundación Lifebridge de Nueva York y la Fundación Bial de Portugal.
20 Willow Road,
London NW3 1TJ,
England
ars@dircon.co.uk

REFERENCIAS
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BRAUDE, S. (1979) ESP and psychokinesis: A philosophical examination. Philadephia, PA: Temple University.
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jueves, 30 de octubre de 2008

CAUSAS PROFUNDAS DE LAS ENFERMEDADES

 

Es el conjunto de nuestros tres cuerpos sutiles superiores (los de más alta frecuencia vibratoria) lo que determina esa porción más elevada de nuestro ser. Es también esta área de la esencia humana la que ha dado origen a lo que hoy se conoce como la psicología transpersonal, que también está avanzando firmemente en la aceptación por parte de la comunidad de psicólogos, pero que aún comprende una fracción muy reducida de ellos.

Es este Yo Esencial el que está relacionado con las viejas preguntas filosóficas acerca de quiénes somos, de dónde venimos y hacia dónde vamos. Es con este Yo Transpersonal con el que se conectan los sujetos en un trance místico o en estados alterados de conciencia especiales. Es un estado de conciencia expandido en que se experimenta una gran sabiduría, una sensación de conexión con todo lo creado ya sea otros seres humanos, flora, fauna, objetos, etc. También se experimentan una paz, tranquilidad, felicidad y amor indescriptibles.
La sabiduría de esta personalidad espiritual, busca influir para que nuestra personalidad inferior avance y evolucione lo mejor posible en este camino de crecimiento personal que está ligado a la superación de nuestros bloqueos emocionales, defectos, malos hábitos y patrones incorrectos en la estructura de nuestra personalidad .

Según el Dr. Edward Bach, (redescubridor del poder terapéutico de las esencias florales), el desencuentro entre los objetivos que persigue estas personalidad superior y las decisiones erradas que adopta nuestra personalidad inferior, es lo que determinan en gran medida la aparición de enfermedades específicas en el ser humano.

Al igual que los sueños las enfermedades representan mensajes simbólicos, a través de los cuales nuestro Yo Esencial o Transpersonal nos alerta y nos llama la atención para que nos demos cuenta de que ha llegado el momento de que tenemos que hacer cambios radicales en nuestras vidas, precisamente en estas conductas y hábitos que son contrarios a nuestro crecimiento espiritual
Pero así como no es fácil interpretar nuestros sueños, tampoco es fácil entender qué nos quiere decir el tipo de enfermedad que estamos experimentando. (Sugerimos como una valiosa ayuda en este aspecto el libro de Louise L. Hay " Sana tu cuerpo")
Desde este punto de vista cobra un gran significado la ubicación de la dolencia dentro del cuerpo, su cronicidad, su intensidad, su duración y su aparición en ocasiones después de un evento traumático.
Para descifrar estos mensajes simbólicos de la enfermedad nos damos cuenta entonces que el paciente requiere de mucha ayuda, porque además no se percata que ha sido él mismo quien ha propiciado la aparición de su enfermedad y por otra parte para complicar más las cosas, su personalidad inferior, sus egos, su estructura de personalidad, su coraza defensiva, por naturaleza se resisten tremendamente a los cambios.
Es increíble comprobar como muchos pacientes en el fondo, subconscientemente no quieren sanarse, prefieren ganancias secundarias como el inspirar lástima, llamar la atención, inducir el amor de sus parientes y cercanos, o pagar culpas auto asumidas y muchas veces irreales, porque esto les resulta más fácil y más cómodo.
Les es mucho más difícil e incómodo aceptar el desafío de empezar a corregir sus actitudes incorrectas o inadecuadas.
Decíamos entonces que para vencer estas dificultades intrínsecas de la condición humana, el paciente requiere mucha ayuda al tiempo que necesita estar informado de esta realidad para poder desarrollar una voluntad adecuada y poner lo necesario de su parte para poder revertir sus enfermedades.
Dentro de la ayuda que todo paciente debiera recibir, necesitaríamos que los médicos además de concentrarse en temas exclusivos de sus especialidades, tuvieran un manejo mínimo de una psicología básica que contemple estos aspectos citados, y de los temas bioenergéticos de fondo que subyacen en toda enfermedad.
Ojalá a futuro tuviéramos médicos informados en todos estos decisivos factores, que idealmente también supieran trabajar en equipo, por ejemplo, con psicólogos transpersonales y terapeutas energéticos para llegar a una verdadera sanación de los casos graves.
Nos referimos especialmente a los psicólogos transpersonales porque tal como citamos, es la Psicología Transpersonal la que ha logrado llegar a estas realidades más profundas de la esencia humana. Desgraciadamente la Psicología Transpersonal al igual que las terapias alternativas todavía no son bien comprendidas, ni aceptadas por la gran mayoría de la comunidad académica. Son más difundidas las modalidades de la psicología psicoanalítica, cognoscitiva, conductista, etc.
Es por esto que saludamos con gran satisfacción y reconocimiento a la valentía de los directivos académicos de la Universidad del Pacífico, que han creado una carrera de Psicología con especialización en Psicología Transpersonal. Pensamos que hay aquí un progreso adelantado a su época que es lo que demandan los tiempos especiales que vivimos.

A partir de lo anterior es que se vislumbra el gran problema de la medicina convencional. Se ha acostumbrado al paciente a que por el dinero que cancela a su médico, éste debe recetarle ciertas píldoras mágicas que terminen con su enfermedad, idealmente y en lo posible con el menor esfuerzo o incomodidad de su parte.
El paciente entonces transfiere toda responsabilidad al médico y no se hace cargo, pues el sólo es una "víctima" de su dolencia. El médico debe ser, pues, el único encargado y responsable de su sanidad, para eso ha estudiado en la Universidad y para eso se le paga.
El problema con este criterio es que el paciente no se percata del mensaje que hay detrás de cada enfermedad. Luego no se responsabiliza ni asume la necesidad de cambio que se requiere para aprender la lección y poder sanar.
A partir de esta situación en que el paciente no llega al meollo de su problema, es que muchas enfermedades se hacen crónicas y se perpetúan en el tiempo.
Es aquí donde observamos las graves falencias del actual sistema de la medicina convencional. Cuando observamos la gran cantidad de enfermedades como el reumatismo, esclerosis múltiple, cáncer, SIDA, o enfermedades mentales como la esquizofrenia, las depresiones bipolares, las crisis de pánico, etc., donde la medicina muchas veces proporciona solamente un alivio farmacológico pero pocas veces se llega a revertir el problema.
Queremos sin embargo dejar en claro que las críticas que hacemos al actual sistema pretenden ser lo más constructivas posibles. Destacamos también, por otro lado, todos los avances que la medicina ha tenido en distintas áreas, como por ejemplo, en las reparaciones quirúrgicas de los órganos afectados en distintas especialidades. La cirugía muchas veces representa la única posibilidad de salvar la vida a un paciente, y en esto ha habido un gran perfeccionamiento.
Como profesionales de la salud alternativa, en caso de sufrir un accidente nos gustaría que nos llevaran rápidamente a un centro de atención de urgencia, en lo posible incluida la UTI, y no donde un terapeuta alternativo, por supuesto.
La fertilización in vitro, los trasplantes, los implantes, los antibióticos, los avances en los instrumentos médicos de diagnóstico, los perfiles bioquímicos, la resonancia magnética, y muchos otros adelantos han permitido remediar problemas y prolongar el índice de vida media de las personas. El inconveniente es que esto no siempre está aparejado con el índice de calidad de esta vida, lo que se resiente especialmente en enfermedades de evolución lenta donde hay sólo paliativos.
Es en este ámbito donde las mal llamadas medicinas alternativas, tienen que entenderse como complementarias, y darnos cuenta del aporte trascendental que pueden hacer para llegar a niveles de sanación más profundos y duraderos. También es importante percatarnos de la utilidad que tienen en el área de lo que se ha dado en llamar medicina preventiva, es decir favoreciendo condiciones saludables que impidan llegar a la forzosa necesidad de las intervenciones quirúrgicas.

Tenemos que comprender que lo decisivo en el proceso de recuperar nuestra salud, es cuando se activan las capacidades autocurativas que todos tenemos a niveles muy profundos: podríamos denominar esto como la activación de nuestros "sanadores internos"
Es así que en muchos casos donde la enfermedad es de mediana intensidad, leve o incipiente, basta con el mecanismo tradicional de la medicina, en que el paciente llega esperanzado ante el médico al cual él ha puesto en un sitial privilegiado, y en quien confía como su gran salvador. Luego este profesional le receta unos medicamentos estupendos que además le alivian rápidamente sus síntomas molestos. En muchos casos y como decíamos cuando el problema es leve, esto es suficiente para que se despierten en este paciente sus mecanismos autocurativos, sus sanadores internos, y recupere así totalmente su salud. Vemos aquí operando un mecanismo de placebo y sugestión que actúan a nivel del subconsciente del enfermo y logran su objetivo.
Sin embargo desgraciadamente también nos encontramos con muchísimos casos en que el problema es más grave, porque hay traumas psicológicos más profundos, o hay actitudes erróneas que deben ser cambiadas, y aquí entonces el mecanismo de la píldora mágica no da resultado y la enfermedad se vuelve crónica. Ocurre luego el agravante de que al insistir el médico en suministrar los fármacos que él cree que son los que curan, se van acumulando las toxinas y los efectos secundarios de estos medicamentos, que por ser químicamente sintéticos, van a contrapelo de la química normal, natural y equilibrada del metabolismo de las células humanas.
Este organismo humano es una máquina tan maravillosa y compleja, y además está movida por una inteligencia tan formidable que se defiende de estas toxinas y venenos con gran habilidad. Así se explica como resistimos por años, el cigarro, las drogas, los medicamentos, los psicofármacos, el alcohol, la contaminación del aire, del agua y la comida, etc. Pero más temprano que tarde, los efectos secundarios de estos remedios y sustancias químicas, se hacen notar agravando el problema de salud original hasta llegar a intoxicaciones medicamentosas severas que colapsan a los órganos encargados de la limpieza y desintoxicación como el hígado, los riñones y el sistema linfático. Se propicia de este modo llegar a instancias mucho más graves que pueden derivar en desenlaces fatales a temprana edad.
Es así como hay estudios estadísticos que muestran que los efecto colaterales de medicamentos son, a lo menos, la cuarta razón de muerte en los Estados Unidos, y podemos extrapolar esto a muchos otros países del mundo. Los pacientes muchas veces comienzan a tomar medicamentos para sanar enfermedades originadas por medicamentos anteriores. Nos encontramos así con un círculo vicioso y con una industria farmacéutica, que profita excesivamente de la enfermedad humana y a la cual, desde esa perspectiva, no le conviene la salud.

Resumiendo, hemos destacado en esta página la importancia crucial que tiene el hecho de que sea el mismo paciente quien tome conciencia del orígen psicológico y emocional profundo de sus enfermedades, y de la necesidad de cambios radicales en su conducta y visión de la vida. Sin esto cualquier mejoría se complica.

DESCRIPCION DE CUERPOS SUTILES

 

Muchos investigadores y científicos como Gerber, Tiller y Barbara Ann Brennan (http://www.barbarabrennan.com) - científica y clarividente, autora de "Manos que curan"(1987) y "Hágase la Luz"(1993) - aunque con algunos matices y nombres distintos, han concordado en la existencia de varios de los siguientes cuerpos sutiles en la estructura multidimensional del ser humano:

A.- Cuerpo etérico

B.- Cuerpo emocional

C.-Cuerpo mental

D.- Cuerpo astral

E.- Cuerpo del patrón etéreo

F.- Cuerpo celestial

G.-Patrón cetérico

También hay concordancias en distintos investigadores, para aceptar junto a los cuerpos sutiles, de la existencia de determinadas estructuras sutiles de energía rotatoria y de forma cónica, denominados "chakras" por la sabiduría del antiguo oriente. Las funciones y propiedades de estos chakras las describiremos después de los cuerpos sutiles.

La existencia de estos cuerpos sutiles o campos bioenergéticos, permite que los clarividentes puedan percibir lo que se denomina comunmente como "aura" en los seres humanos.
La condición de clarividencia o visión de otras dimensiones se facilita en personas con su chakra frontal más desarrollado.
Podemos considerar que la materia de la que esta hecha el cuerpo físico, está estructurado por "luz congelada" o densificada. A partir del cuerpo físico, los distintos cuerpos sutiles estructurados por vibraciones u ondas más veloces que la luz, se van diferenciando cada uno del siguiente por la mayor rapidez y frecuencia de estas ondas que determinan una especie de materia cada vez más fina o sutil, imperceptible para el ojo físico normal, pero si visibles para el clarividente.
El orden ascendente es el sugerido por el diagrama. Los cinco cuerpos de abajo son los que determinan psicológicamente nuestra "personalidad inferior", cuyas connotaciones visibles son estudiadas por la psicología oficial.

Los 3 cuerpos de arriba determinan una "personalidad superior", yo trascendente o yo transpersonal, de lo cual se ocupa exclusivamente la incipiente Psicología Transpersonal.
Para esta vertiente psicológica los denominados trances místicos y otros estados alterados de conciencia, son el resultado de la conexión del sujeto con su yo transpersonal y no de estados enfermizos esquizofrénicos como lo suponía Freud, y a partir de él muchas otras corrientes psicológicas.
Podemos considerar que esta personalidad superior estructura un área trascendental o espiritual del ser humano que es real y concreta, y es independiente de si el individuo profesa una u otra religión, o si es creyente o ateo. Correpondería a lo que de siempre la humanidad ha intuído como alma o espíritu en el ser humano.
La existencia de este yo transpersonal es de extrema importancia, pues según muchos investigadores, entre ellos el Dr. Edward Bach (redescubridor del poder sanador de las esencias florales), la mayoría de las enfermedades conocidas tienen su origen profundo precisamente en el desencuentro entre los anhelos de continuo crecimiento espiritual de este yo superior, y las decisiones egóticas y errantes del yo inferior. Estos desencuentros se caracterizarían por bloqueos e interferencias del flujo energético adecuado entre ambas personalidades, lo que finalmente redunda en la materialización de enfermedades. (Ir a página sobre las CAUSAS PROFUNDAS DE LAS ENFERMEDADES cliqueando aquí)

Los breves lapsos de conexión que pueden tener los individuos con su yo transpersonal durante un trance místico,( y a pesar de la dificultad para definir estas realidades con un vocabulario intelectual limitado), podrían especificarse como sigue:

- Sentimientos extremos de paz y felicidad inefables.
- Expansión de la conciencia sin límites y lucidez extraordinaria, que permiten encontrar rápidas respuestas a las más viejas preguntas filosóficas, acerca del verdadero sentido de la vida.
- Sentimiento de interdependencia, ligazón y amor profundo e incondicional por todo lo creado: seres humanos, naturaleza, flora, fauna, e incluso objetos inanimados, etc.

Esta personalidad superior permanentemente intenta guiar y orientar a la personalidad inferior comunicándose a través de un lenguaje eminentemente simbólico durante el sueño y también por medio de las enfermedades. De esta forma el tipo, la duración y la gravedad de la dolencia, su ubicación en el cuerpo, etc., contienen mensajes importantísimos de descifrar para llegar a una sanación profunda y completa.
Hay diversas técnicas que propician el contacto con el yo transpersonal, como la meditación, contemplación, concentración, oración, diferentes tipos de respiración, mantranización, Reiki, Yoga, Tai Chi, etc.
Todas estas disciplinas tienden al desarrollo del lóbulo derecho del cerebro que es más afin con el lenguaje simbólico, sentimental, artístico, poético, metafórico, propio del yo superior. Recientemente se ha hablado mucho respecto a la denominada "inteligencia emocional" que representa grandes ventajas al momento de conectarse a través de la intuición (que no pasa por procesos analíticos) con fuentes de sabiduría exacta y excenta de errores, como son las que posee nuestro yo trascendental.
En cambio el lóbulo izquierdo del cerebro es el que esta relacionado con las capacidades intelectuales, analíticas, racionales, que independientes de la genialidad del individuo, llegan a un punto de ser insuficientes y limitadas para comprender y relacionarse con este yo esencial.

El cuerpo etérico

En el cuerpo etérico es una matriz o una plantilla energética donde se superpone la estructura de nuestro cuerpo físico. Este molde energético también es el vehículo de la información que determina el desarrollo, por ejemplo, del feto durante la gestación en el útero, así como también el de los datos estructurales que dirigen la reproducción y reparación de los tejidos después de una lesión o enfermedad.
Esta información inteligente contenida en la matriz etérica es la que da origen a la organización genética de las células. Hay experimentos que demuestran que previo a la formación de una hoja de una planta, en la contraparte etérica ya se ha desarrollado la estructura completa de ella.
Por el mismo mecanismo, muchas enfermedades tienen sus comienzos en bloqueos energéticos del cuerpo etérico y más tarde se manifiestan como patología orgánica del cuerpo físico.

Así como en el cuerpo físico existe una circulación de sangre a través de arterias, capilares y venas, también en el cuerpo etérico existe una circulación de un flujo energético de "materia sutil" a través de canales, como los 24 pares de meridianos de acupuntura y los 72.000 nadis referidos en la medicina ayurvédica.

Es en este nivel etérico donde la persona experimenta todas sus sensaciones físicas, dolorosas y agradables. Allí donde haya un dolor corporal, hay un correlato directo de disfunción en este primer nivel del campo aural. De aquí podemos deducir el por qué la acupuntura es tan efectiva para reducir muchos tipos de dolor.

La científica Barbara Ann Brennan, quien además posee el don de la clarividencia (visión en otras dimensiones), nos relata percibir este cuerpo extendiéndose desde 1,25 cm hasta 5 cm, más allá del cuerpo físico, dependiendo de la persona y su estado energético. Ella lo visualiza de un color azul claro en personas tranquilas y sensibles, y de un azul grisáceo más oscuro en las personas fuertes y robustas. Cuanto más se conecte usted con su cuerpo, tenga cuidado de él y lo ejercite, más fortalecerá y desarrollará el primer nivel del campo.


Semblanza de cuerpos sutiles del artista Alex Gray

La sonda 'Mars Reconaissance Orbiter' detecta dos nuevos tipos de minerales en Marte

 

  • El hallazgo sugiere que hubo agua durante mucho más tiempo de lo que se creía

 

WASHINGTON.- La sonda Mars Reconnaissance Orbiter ha descubierto sobre Marte nuevos tipos de minerales que sugieren la presencia de agua en el planeta durante mucho más tiempo de lo que se creía.

Según ha informado el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL, por sus siglas en inglés) de la agencia espacial estadounidense, esos minerales también indican la importancia que tuvo el líquido en la topografía marciana así como en la posible creación de vida.

Las imágenes captadas por el espectrómetro de la sonda de esos yacimientos demuestran la presencia de silicio hidratado, más conocido como opal, los cuales son los indicios fundamentales de la presencia de agua en el antiguo Marte.

"Este es un importante descubrimiento porque extiende el tiempo en que hubo agua líquida en Marte y (señala) los lugares donde pudo haber respaldado la vida", indicó Scott Murchie, investigador a cargo del espectrómetro en el Laboratorio de Ciencias Aplicadas de la Universidad Johns Hopkins.

"La identificación del silicio opalino nos revela que es posible que haya habido agua hasta hace unos 2.000 millones de años", indicó. Hasta ahora, el orbitador del planeta sólo había detectado la presencia de filosilicatos y sulfatos hidratados que se formaron hace más de 3.500 millones de años.

Según el comunicado de JPL, los nuevos minerales detectados se formaron cuando el agua alteró materiales creados por la actividad volcánica o por el impacto de un meteorito.

"Hemos visto numerosos promontorios de materiales opalinos en capas delgadas que se extienden sobre largas distancias en torno a los bordes del Valles Marineris así como dentro de esa misma quebrada", indicó Ralph Milliken, científico de JPL.

En algunos lugares las formaciones de minerales opalinos se encuentran en el cauce seco o alrededor de lo que aparentemente fueron corrientes similares a un río. Según indicó el comunicado de JPL, eso indica que hubo agua en la superficie de Marte durante mucho más tiempo que el líquido que ayudó en la formación de los minerales opalinos.

"Lo más importante es que mientras más tiempo haya existido el agua en Marte más tiempo hubo para la presencia de vida", indicó.

miércoles, 29 de octubre de 2008

2. Científicos de renombre que han investigado

 

'Estoy absolutamente convencido del hecho de que aquellos que una vez vivieron en la tierra pueden comunicarse con nosotros y, de que lo hacen. Es muy difícil trasmitirle al inexperto una idea adecuada de la fortaleza y cantidad de la evidencia.'
Sir William Barrett F.R.S.

'Insistimos en decirles que la comunicación es posible. He demostrado que las personas que se comunican son quienes dicen haber sido. Mi conclusión es que la sobrevivencia ha sido demostrada mediante la investigación científica.'
Sir Oliver Lodge F.R.S.

'Es muy cierto que ha sido establecida una comunicación entre este mundo y el siguiente.'
Sir William Crookes F.R.S.

'He estado hablando con mis parientes ya fallecidos, padre, hermano y tíos. Cualesquiera poderes supernaturales sean atribuibles a las personalidades secundarias de la Sra. Piper, la médium, sería muy difícil convencerme de que esas personalidades secundarias puedan haber reconstituido completamente la personalidad mental de mis difuntos parientes.'
Profesor Hyslop, Profesor de Lógica en la Universidad de Columbia

Los brillantes científicos mencionados arriba están entre los primeros en investigar científicamente la continuidad de la vida. Inicialmente todos ellos eran escépticos de mentalidad abierta, y aceptaron la continuidad de la vida solamente después de una investigación concienzuda. Ha habido otros científicos clásicos y pensadores de renombre en otras partes del mundo, tales como Alfred Wallace, Sir Arthur Conan Doyle, Sir Phillip Lodge, Arthur Findlay, Camille Flammarion, el Dr. Baraduc, el Profesor Richet, el Profesor Albert Einstein, Marconi, F.W. Myers, el Profesor William James y el Dr. Carrington quienes aceptaron la continuidad de la vida después de investigarla.

Desde finales del siglo diecinueve hasta hoy ha habido grupos de científicos prominentes y muy respetados — muchos de ellos con los nombres mejor conocidos en las ciencias — que han trabajado para demostrar que la inmortalidad es un fenómeno físico natural y que su estudio es una rama de la Física.

Muchos de estos científicos eran personas muy prácticas cuyos principales descubrimientos en otras áreas cambiaron fundamentalmente la forma de vivir y de trabajar de la gente. Muchos de ellos se consideraban racionalistas y humanista y tuvieron que enfrentarse con intensa oposición por parte del clero cristiano tradicional y de los científicos materialistas, los que se juntaron para tratar de suprimir sus conclusiones.

Emmanuel Swedenborg

Uno de los pioneros en esta tradición fue Emmanuel Swedenborg quien nació en Suecia en 1688. Uno de los científicos punteros de su tiempo, escribió 150 trabajos en diecisiete ramas de la ciencia. Estudió griego, latin, varias lenguas europeas y orientales, geología, metalurgia, astronomía, matemáticas y economía en la Universidad de Upsala. Fue un hombre eminentemente práctico que inventó el planeador, el submarino y un cono para que oyeran los sordos. Fue muy apreciado por todos, fue Miembro del Parlamento y desempeñó posiciones importantes en Minería. Siempre demostró poseer una enorme inteligencia y mantuvo una mente agudamente práctica hasta su muerte.

Swedenborg fue también dotado de clarividencia y pasó más de veinte años investigando otras dimensiones. Afirmaba que hablaba regularmente con personas después de fallecidas.

En una muy bien documentada ocasión, la reina de Suecia le sugirió sarcásticamente que si se encontraba con su hermano ya fallecido, se lo saludara. Una semana más tarde Swedenborg le susurró algo en el oído. La Reina, perturbada, les dijo a los presentes ‘sólo Dios y mi hermano pueden saber lo que me acaba de decir' (Inglis 1977:131).

Swedenborg escribió:

Después de que el espíritu se separa del cuerpo (lo que ocurre cuando la persona fallece) la persona continúa viva, de la misma forma que era antes.

Para asegurarme de esto, he sido permitido de hablar prácticamente con todo aquel que he conocido durante esta vida física — con algunos durante horas, con otros durante semanas y meses, y con otros durante años — todo con el propósito de asegurarme de este hecho, (que la vida continúa después de la muerte) y que yo pueda atestiguarlo (Cielo e Infierno, por Swedenborg : 437).

Swedenborg escribió varios volúmenes acerca de lo que hoy se conoce como experiencias extra corporales, incluyendo descripciones muy detalladas de la postvida. Interesantemente él describió una visión del universo muy similar a la de la Física Cuántica del siglo veinte. Cuando Newton argüía que la materia estaba compuesta de átomos impenetrables movidos por fuerzas externas, Swedenborg enseñaba que la materia estaba formada por una serie de partículas de tamaños en orden ascendiente, cada una de las cuales estaba compuesta de un vórtice cerrado de energía circulando en espirales a velocidades infinitas dando la apariencia de solidez.

Brian Inglis en su Historia de lo Paranormal de 490 páginas (1977) hace referencia a Emmanuel Kant, el gran filósofo racionalista que investigó a Swedenborg. Aunque Kant era un escéptico de mentalidad abierta, le pareció que la evidencia de la postvida proporcionada por Swedenborg era, en un todo, abrumadora.

Inglis cita a Kant diciendo ‘…aunque dudo de cualquiera de ellas, tengo fe en el conjunto de todas ellas’ ( Inglis 1977:132).

Los mayores científicos de su tiempo

Uno de los fundadores de la Sociedad para la Investigación Psíquica (SIP) de Inglaterra era Sir William Crookes, un miembro de la Sociedad Real — una asociación de los más ilustres científicos elegidos por sus colegas y de mucho prestigio — y más tarde su presidente. Descubrió seis elementos químicos incluyendo el talio. Muchos lo consideran como el mayor científico de su tiempo.

Crookes trabajó extensamente investigando los fenómenos de la levitación asociada con el médium D.D. Home. Parte del registro y de la autenticidad de las apariciones eran fotografías conclusivas, así como la ausencia total de fraude y trucos que fue verificada por muchos otros científicos pioneros de sus días. Uno de ellos fue Cromwell F. Varley, uno de los primeros investigadores de la ionización y supervisor de la colocación inicial del Cable del Atlántico. Crookes finalmente se convenció de la realidad de la postvida por medio de una serie de materializaciones impresionantes de su esposa. Es interesante que nunca se haya hecho mención de esta considerable contribución a la investigación de la postvida en ninguna de las biografías científicas importantes.

Otros científicos físicos de renombre

También en su grupo hubo los científicos Lord Balfour, Sir William Barrett, Sir Oliver Lodge and Lord Rayleigh, J. J. Thompson ? el descubridor del electron ? y Alfred Russell Wallace quien propuso la teoría de la evolución al mismo tiempo, e independientemente, que Charles Darwin. Wallace investigó esmeradamente los fenómenos del espíritu durante algunos años, asegurando eventualmente que sus fenómenos estaban tan bien demostrados como los de cualquiera otra ciencia.

Inventores pioneros

Thomas Alva Edison (foto a la izquierda), el inventor americano del fonógrafo y del primer bulbo para luz eléctrica, estaba fascinado con la posibilidad de la postvida y experimentó con dispositivos mecánicos para contactar a los ‘muertos’ (Scientific American, 30/10/1920).

John Logie Baird pionero de la television e inventor de la cámara infra-roja, declaró que había contactado al ‘fallecido’ Thomas A. Edison a través de un(a) médium. Baird dijo:

He presenciado algunos fenómenos sorprendentes bajo circunstacias que eliminan toda posibilidad de fraude (Logie Baird 1988: 68-69).

Glen Hamilton

Otro investigador del siglo veinte fue el Dr Glen Hamilton, médico y miembro del Parlamento de Canadá. En su laboratorio bajo condiciones estrictamente controladas tenía catorce cámaras fotográficas de relampagueo instantáneo controladas electrónicamente, las que fotografiaron apariciones simultáneamente de todos los ángulos. Los observadores presentes en estos experimentos incluyeron otros cuatro médicos, dos abogados, y dos ingenieros, uno eléctrico y el otro civil. Cada uno de los testigos declaró fuerte y unequívocamente que:

'repetidas veces vi materializarse a personas ' (Hamilton 1942).

Los registros meticulosos de esta investigación y su colección de fotografías están expuestas a la observación del público en la University of Manitoba, Canada.
[http://www.umanitoba.ca/libraries/units/archives/collections/manitoba-manuscripts/reg_hamilton.shtml].

En Europa, entre los principios de los 1900s y los 1920s, otros científicos, incluyendo al Baron von Schrenck-Notzing, al Profesor Charles Richet, al Profesor Eugene Ostyand, y al Profesor Gustav Geley, también fotografiaron apariciones en laboratorios bajo condiciones controladas. Sus informes escritos demostraron que ellos investigaron y eliminaron toda posibilidad de fraude y trampas.

Internacionalmente conocido y psiquiatra de ponderosa influencia, el Dr Carl Jung (foto a la izquierda) admitió que los fenómenos metapsíquicos podrían explicarse mejor con la hipótesis del espíritu que por cualquier otra (Jung, Colección de Cartas 1: 431).
Otro científico brillante e inventor que, después de investigar, se convenció totalmente de la existencia de la postvida fue el americano George Meek.

Cuando llegó a los 60 años de edad, George Meek (foto a la izquierda) se jubiló de su carrera de inventor, diseñador y fabricante de dispositivos para acondicionadores de aire y para el tratamiento de aguas servidas. Le fueron otorgadas veintenas de patentes industriales que le permitieron vivir cómodamente y dedicar los siguientes veinticinco años de su vida a la investigación autofinanciada de la vida después de la muerte.

Meek se munió de una extensa biblioteca y de un programa de investigación bibliográfica, y viajó por el mundo localizando y estableciendo proyectos de investigación con los mejores médicos, psiquiatras, físicos, bioquímicos, psíquicos, sanadores, parapsicólogos, hipnoterapistas, ministros, sacerdotes y rabinos. Estableció la Fundación Metaciencia en Franklin, North Carolina, la que auspició la famosa investigación Spiricom. Esta demostró el contacto instrumental extenso de doble via entre personas vivas y personas en la postvida (ver el Capítulo 4 sobre la Trascomunicación Instrumental)
Su último libro, Después Que Morimos Entonces Qué (1987) (After We Die What Then), compendia las conclusiones de sus años de investigación-a-tiempo-completo —que todos sobrevivimos y que en los últimos veinticinco años la humanidad ha aprendido más sobre lo que pasa cuando morimos que en todos los períodos anteriores de la historia conocida (Meek 1987:4).

Algunos de los punteros de la investigación científica de la postvida son médicos extremamente inteligentes y astutos que iniciaron sus investigaciones como escépticos. La Dra. Kübler-Ross, quien ha tenido impacto global en la manera de tratar a los moribundos, se convenció totalmente de la vida después de la muerte por su asociación con los miles de pacientes moribundos. Ella así lo puso:

Hasta entonces no tenia la mínima creencia en la postvida, pero la información me convenció de que no eran coincidencias ni alucinaciones (Kübler-Ross 1997: 188).

Ella se convenció tanto que escribió cuatro libros que tratan de la postvida: De la Vida después de la Muerte (1991), Los Hechos de la Vida después de la Muerte(1992), La Muerte es de Vital Importancia: Vida, Muerte y Vida después de la Muerte (1995), La Rueda de la Vida (1997). La entrevista maravillosa de Elisabeth con John Harricharan puede leerse en el portal cibernético Insight 2000 [http://www.insight2000.com/Kübler-Ross.html].

El Dr Melvin Morse (un pediatra y reconocida autoridad mundial de punta en niños moribundos) era, según él lo dijo,‘un médico-de-cuidado-intensivo arrogante’ con ‘un prejuicio emocional contra todo lo que fuese espiritual’ antes de que sus estudios con bases científicas de niños moribundos, y su extenso estudio de la bibliografía, lo llevaran a la conclusión inescapable de que ‘hay algo divino que le sirve de aglutinante al universo’. Él escribe así:

Cuando reviso la literature médica, pienso que apunta directamente a la evidencia de que algún aspecto de la conciencia humana sobrevive a la muerte. Hay otros investigadores que concuerdan conmigo. El médico Michael Schroter-Kunhardt, por ejemplo, condujo una revisión completa de la literature científica y concluyó que las capacidades paranormales de los moribundos sugieren la existencia de un espíritu inmortal que trasciende el tiempo y el espacio. Otros investigadores han llegado a la misma conclusión. Ya sea a través de casos propios o de casos que han revisado, existe en la comunidad científica una creciente creencia en el espíritu humano (Morse 1994:190).

Hoy en día mucho de lo nuevo en el entendimiento de la postvida nos viene de los físicos quienes, a través de sus trabajos con las partículas subatómicas se están dando cuenta de la limitación de los paradigmas científicos.

Grupos de científicos, matemáticos y profesores universitarios a través de todo el mundo están trabajando para hacer conocer los resultados de sus experimentos con las partículas subatómicas y de los cálculos matemáticos que proveen explicaciones científicas de los llamados fenómenos psíquicos.

La física moderna ahora enseña que los átomos son 99.99999% vacíos ? la distancia entre un electrón y su núcleo siendo proporcionalmente tan grande como la distancia entre la tierra y el sol.

El astrofísico Michael Scott de la Universidad de Edinburgh arguye que:

El avance de la física cuántica ha producido una descripción de la realidad que permite la existencia de universos paralelos. Compuestos por sustancias reales no interfirirían con la materia de nuestro propio universo. (Roll 1996).

El professor Fred Alan Wolf parece concordar con estos hallazgos. En su libro La Mente y la Nueva Física dice:

Tan fantástico como suena, la nueva física, llamada mecánica cuántica, propone que existe, a la par de nuestro mundo, otro mundo, un universo paralelo, un duplicado que es algo diferente y aún el mismo. Y no sólo dos mundos paralelos, sino que tres, cuatro ¡y aún más! ¡En cada uno de esos universos estamos viviendo tú, yo, todos los otros que viven, los que han vivido, los que vivirán, y los que han de vivir por siempre (Wolf 1985).

La evidencia proveniente de muchos científicos de que la postvida existe es abrumadora. Pero como ya se dijo arriba, NO hay ni un científico que haya demostrado, o argüido empíricamente, que la postvida no existe, o que no puede existir

Esto no significa que se le esté preguntando a los escépticos-de-mentalidad-cerrada que ‘demuestren lo negativo’ como a algunos escépticos-hasta-los-tuétanos les gusta decir. Los capítulos del 3 al 24 de este libro constituyen la evidencia admissible de la postvida. En los cuatro años desde que publiqué esta investigación en la Internet, no ha habido ningún escéptico, ni médico, ni teólogo, ni nadie que haya podido rebatir, refutar, o negar esta evidencia de la postvida.

He enviado mi investigación a los mayors eruditos, teólogos, científicos, escépticos-materialistas-de-mentalidad-cerrada de los Estados Unidos, del Reino Unido, y de Australia, y ha sido colocado en la Internet para consumo mundial para que rebatan mi investigación. Uno o dos dijeron que entrarían en contacto conmigo para rebatir mi investigación, pero hasta hoy, años más tarde, nadie me ha contactado de nuevo para demostrar que la evidencia presentada en este trabajo puede ser rebatida técnicamente o negada en alguna forma.

Por el contrario, he recibido y continuo recibiendo respuestas positivas abrumadoras acerca de la investigación de diferentes partes del mundo. La gente generalmente expresa la opinion de que es muy excitante que la postvida ahora sea apoyada por la ciencia y que ya no sea de la jurisdicción exclusiva de los dogmatistas religiosos.