Utilizando una maquina de imágenes por resonancia magnética para registrar la actividad cerebral medirán los efectos que tiene la fe religiosa en la percepción de dolor
La prueba se realiza con 24 voluntarios la mitad católicos y la otra mitad ateos no creyentes. Se les muestras dos pinturas diferentes, una la Virgen Maria y la otra un cuadro no religioso de Sa Vinci. Con cada imagen recibirán una descarga eléctrica. Se les ha pedido que califiquen el dolor que les produce la descarga
No solo se registran las reacciones de los pacientes sino que también la actividad de sus cerebros durante el experimento
Los resultados revelan un patrón consecuente. Lo primero que notamos es que los voluntarios católicos sufrían menos dolor pero solo cuando miraban la pintura de la Virgen. En el grupo ateo no se produce actividad en un area que si lo hace y ayuda a minimizar el dolor
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